Flauta Auriñaciana
elaborada sobre hueso de animal, yacimiento de Geissenklösterle
(Suabia,
Alemania).
El sonajero, construido a base de llenar con semillas o bolitas de arcillas una calabaza vacía, es de los más antiguos. Este instrumento del Neolítico tenía un gran uso en sesiones de hechicería o en ceremonias religiosas y además de una calabaza se podía utilizar cualquier base, como una cáscara de coco, que diera lugar a ese ruido característico de una maraca, quizás el ejemplo más claro de sonajero que se propagará por Egipto, la India y estará presente en Grecia.
Otro
instrumento rey de la percusión en esos inicios de la historia de
los instrumentos es el crótalo. Considerado el antecesor de las
castañuelas, estaba compuesto por dos tablillas alargadas de madera
o de marfil, y unidas por la base. Estos platillos tan antiguos ya
aparecen pintados en los numerosos bajorrelieves que han llegado
hasta nosotros y que corresponden a las civilizaciones mesopotamica y
egipcia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario